Valencia, 29 de noviembre de 2005
El campo valenciano pendiente del último intento negociador con el MAPA. Mientras, la UPA-PV conmina al conseller Cotino a cumplir sus competencias
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-PV) considera que después del fracaso del cuarto intento de negociación para paliar el incremento de los precios de los derivados del petróleo, debe dejarse la última puerta abierta para que el Ministerio de Agricultura y Pesca reaccione y reconsidere sus ofertas, de forma que las ayudas beneficien directamente al productor, cosa que no se ha venido produciendo.
Por otra parte, como la mayoría de las problemáticas que sufre el campo valenciano incumben directamente a la Generalitat Valenciana, la UPA-PV conmina al conseller de Agricultura para que cumpla sus competencias, sin marear con informaciones sobre la creación de medio centenar de mesas de trabajo, cuando los planes que ofrece no son otra cosa que la redistribución de los fondos existentes que a todas luces se han mostrado insuficientes.
Como repaso de las problemáticas del campo valenciano, UPA-PV solicita al conseller que más que realizar planes sectoriales, tenga en cuenta que la agricultura valenciana necesita un control de precios de la red productor-consumidor, facilidades reales para la modernización de la maquinaria, seguros que garanticen de una vez por todas una renta mínima, acceso de los jóvenes y las mujeres a la propiedad agrícola, control sobre la pérdida de suelo cultivable.
Asimismo es necesaria una ley sobre productos frescos y perecederos, asegurar de verdad la trazabilidad de nuestros productos y controlar la producción foránea, contratos homologados para saber a qué precio se venden nuestros productos agropecuarios y con qué garantías, seguridad fitosanitaria, agua para evitar los déficit hídricos, sea de donde sea; en definitiva, una verdadera potenciación de la agricultura valenciana eficaz y decidida.
Como medida concreta, la UPA-PV, aparte de las movilizaciones que sean precisas, propondrá al resto de organizaciones agrarias, una campaña de sensibilización para que la sociedad valenciana conozca la situación límite que atraviesa la agricultura valenciana.