9 de marzo de 2006
Unos 500 trabajadores del grupo textil Saez Merino se concentraron hoy en las instalaciones centrales de la empresa, en el polígono Vara de Quart de Valencia, en protesta por el expediente de regulación de empleo (ERE) que presentará en los próximos días. Ver imágenes
La movilización de los trabajadores realizada hoy -primer día de la convocatoria de huelga indefinida- comenzó a las 9 de la mañana con una protesta en el almacén logístico de la empresa en Ribarroja (La Reva) en la que participaron unos 300 empleados.
Posteriormente, trabajadores de los distintos centros del grupo se desplazaron para secundar estas protestas y, así, la huelga fue seguida por el cien por cien de la plantilla de los centros de Segorbe (Castellón), Benaguasil y Cheste (Valencia) y Daimiel (Ciudad Real), y por el 60 por ciento en la planta de Ribarroja.
En la concentración ante las oficinas en Valencia participaron también ex trabajadores del grupo en los centros de Ayora y Casas Ibáñez, dos de las fábricas cerradas tras las medidas puestas en marcha por el grupo valenciano a mediados de 2004, que supusieron el despido de 548 trabajadores, el cierre de cuatro centros productivos y la externalización de más de la mitad de la actividad de confección en el norte de Africa.
Durante esta manifestación, representantes sindicales se reunieron con directivos de Saez Merino para exigirles la presentación de un plan global de viabilidad que mantenga el actual modelo de empresa industrial y comercial y el empleo en todas sus áreas (textil, confección, logística, administración y comercial).
Ramón Morales, secretario de Acción Sindical de la FIA-UGT-PV explicó que, aunque es cierto que es necesario el acuerdo con la banca y los acreedores para garantizar la continuidad de la empresa y su no disolución, también es necesario alcanzar un acuerdo con los trabajadores.
Para ello, tanto la UGT como CCOO están dispuestos a ejecutar de forma indefinida la huelga convocada, si es necesario. Morales señaló que la empresa ha elegido el procedimiento mercantil para poder despedir a la mayor parte de los trabajadores y además con la mínima indemnización, incluso a través del Fondo de Garantía Salarial.
La empresa ha anunciado que esta misma semana o la próxima presentará el expediente de regulación de empleo ante el juzgado, sin que hasta el momento se haya dado a conocer su alcance. Una vez el juzgado admita a trámite la solicitud del ERE, los sindicatos pedirán la mediación del Gobierno valenciano para el mantenimiento del máximo empleo. Morales señaló que Sáez Merino reúne todas las condiciones que se consideran imprescindibles para la continuidad de una actividad, como son el diseño, el valor añadido, la marca (comercializa Lois, Caroche, Cimarron y Caster) y la red de distribución, y por eso no podemos consentir su desmantelamiento para que vaya a otros países.
Después del mediodía, los trabajadores de la textil se desplazaron al centro de Valencia para, con motivo de la afluencia de público a la mascletá, y repartir unas hojas informativas para que la ciudadanía valenciana conozca su situación laboral.